A la hora de enviar la colación para el jardín infantil siempre elijo frutas frescas, las chicas están acostumbradas a comerlas y la verdad es que es algo muy práctico. No obstante, quería poder prepararles un snack saludable que pudieran llevar y comer con las manos sin tener que recurrir a la cuchara o tenedor.
Ellas aún tienen muy limitada la cantidad de azúcar que consumen, creo que hasta ahora su mayor ingesta de azúcar ha sido mediante el yogur, así que quería encontrar la forma de prepararles algo dulce pero sin azúcar añadida.
Para darles una carga proteica, sumé la mantequilla de maní, y este fue el resultado:
Galletas muy húmedas, suaves, casi parecen bizcochuelo pero no. Ricas, con sabor a frutas y ese toque a maní que hace que parezca postre.
Ingredientes
- 2 manzanas rojas medianas
- 1 taza de agua
- 2 plátanos bien maduros*
- 1/4 taza de mantequilla de maní cremosa
- 1 taza avena tradicional
- 1/4 cucharadita de canela molida
Preparación
Precalentar el horno a 180ºC. Pelar y cortar las manzanas en pedacitos pequeños. En una olla pequeña agregar el agua y las manzanas y llevar a fuego fuerte hasta que estén blandas (y se pueda atravesar la punta de un cuchillo con facilidad). Escurrir el agua** y procesarlas con ayuda de la minipimer para llegar a tener un puré homogéneo.
Aplastar los plátanos con un tenedor, incorporar el puré de manzanas, la mantequilla de maní, la avena y la canela. Mezclar bien y con una cuchara formar galletas sobre una silicona apta para hornear (también se puede utilizar una placa cubierta en papel aluminio). Llevar al horno por aproximadamente 30-35 minutos, o hasta que los bordes se vean marrones y la superficie dorada.
Dejar enfriar y ¡a comer!.
*Los plátanos debieran estar casi marrones, ya que es cuando más dulces están. En mi caso estaban aún amarillos, pero también funcionan.
**El agua de la manzanas puede enfriarse y ser tomado como jugo.
Tip: Estas galletas también pueden ser consumidas por niños que están aprendiendo a comer sólidos, ya que no contiene huevo y se ha demostrado que el consumo de mantequilla de maní desde una edad temprana es beneficioso para su salud, ya que disminuye el riesgo de alergias a futuro. Son muy suaves y pueden molerse con la lengua.
Nota: Estas galletas deben ser guardadas en refrigerador debido a sus ingredientes, e idealmente consumirse dentro de 2 días.
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